12/26/2011

Dios salve al Rey



Dios salve al Rey

¡Qué dolor de cabeza¡ ¡qué pereza¡ qué fácil es del árbol caído hacer leña. Es terrible ver cómo sale por todos los sitios lo peor, la caspa, lo recaudadores y los deudores.

Qué poco nos acordamos de la Monarquía para las cosas buenas. La institución Monárquica que representa nuestro gran Rey Juan Carlos I, trajo la democracia a España y nos libró de todo mal, Amén. Se sometió voluntariamente a referéndum. Todo eso, ahora parece fácil y fluir. ¿Vino rodado? no, no es así, ni fue fácil para nuestro Monarca ni nada vino rodado. Hubo que sujetar los travesaños para no perderle tren y a la vez no descarrilar.

Sí, soy monárquico al cien por cien. Considero que es la mejor de las opciones. Además dan una gran independencia, cohesión, continuidad y lustre a nuestra España. Recuerdo en los primeros años de reinado de D. Juan Carlos lo orgullos que nos sentíamos cuando SS MM visitaban países y más países y se les recibía con las puerta abiertas (por ellos) y las manos llenas de ayudas para nuestra España. Recorrieron el mundo mostrando una España plural, dinámica y moderna. ¿Recuerdas? Claro, supongo que ahora no nos interesa.

El caso es, como se suele decir, la procesión va por dentro y para su majestad está llegando a su fin su “annus horribilis”. D. Juan Carlos pondrá buena cara, porque para él, lo primero de todo es España. Afrontará las Navidades lo mejor posible, renunciando a su familia. Estos días de fiesta no van a ser tan alegres en Zarzuela. Habrá ausencias y se le revolverán las entrañas. En familia todo se perdona, lógico por otra parte, pero el daño a la Institución ya está hecho. D. Juan Carlos no puede aceptar su presencia, tiene otros objetivos como cabeza coronada, por los que tanto luchó.

Desgraciadamente muchos aprovechan las circunstancias- Ya se sabe que por la peana se adora o se mata al santo, en este caso a la Casa Real española y yo no. Mucha gente está deseando encontrar cualquier excusa para que corra la sangre real como la de los zares en Julio de 1918.

Yo brindaré con Moët & Chandon por la Institución. Lo llevo en la sangre directa. Recuerdo la narración de una persecución por la Gran Vía madrileña, cuando lucir en la solapa la insignia de Juan III era motivo de persecución. Eran los años más duros del anterior régimen. Un joven burgués, de familia bien avenida y monárquico era perseguido cuando el azul era autoridad. Siempre diferente.

Confío en la Justicia universal y en el Estado de Derecho. Tiempo al tiempo. La casa real no rehúye los problemas y lo primero de todo ha sido señalar el comportamiento como “no ejemplar” y apartar a Iñaki Urdangarin. No da la espalda a las complicaciones. Ahora que el duque de Palma es lo peor, que es un chorizo, un mangante, un delincuente, yo no lo tengo tan claro o sí, pero hasta que no se dicte sentencia… y luego La casa Real como uno más asumirá y respetará el dictamen , faltaría plus. Ejemplo siempre. Quizá el Duque de Palma se ha complicado la vida. Desde hace tiempo todo el mundo hablaba y rumoreaba sobre el aumento desmedido de riqueza y sus propiedades…algo no muy normal o habitual entre los demás. El futuro de la monarquía radica en ser ejemplo para la sociedad española. Y menos mal que tenemos a D. Juan Carlos, para quien ser rey es un deber y una pasión.

No nos dejemos llevar por las palabrerías fáciles de: el dineral, la cantidad de millones, que nos gastamos todos los españoles en la Casa Real, pues no es verdad. Lo mismo que un presidente de una república. ¿Nos cobrarán ellos por su labor impagable durante los años 70,80 y 90…?
Qué ingratos somos con nuestra Real Familia. No es fácil aunar opiniones pero creo y estoy seguro que la Monarquía es imparcial y suma criterios distintos. Pese a que ovejas negras y comportamientos no oportunos los hay en las mejores familias, incluida la familia del Rey.

Artículo 56.
1. El Rey es el Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia, arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones, asume la más alta representación del Estado Español en las relaciones internacionales, especialmente con las naciones de su comunidad histórica, y ejerce las funciones que le atribuyen expresamente la Constitución y las Leyes.
2. Su título es el de Rey de España y podrá utilizar los demás que correspondan a la Corona.
3. La persona del Rey es inviolable y no está sujeta a responsabilidad. Sus actos estarán siempre refrendados en la forma establecida en el artículo 64, careciendo de validez sin dicho refrendo, salvo lo dispuesto en el artículo 65,2.
Artículo 57.
1. La Corona de España es hereditaria en los sucesores de S. M. Don Juan Carlos I de Borbón, legítimo heredero de la dinastía histórica. La sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura y representación, siendo preferida siempre la línea anterior a las posteriores; en la misma línea, el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el varón a la mujer, y en el mismo sexo, la persona de más edad a la de menos.
2. El Príncipe heredero, desde su nacimiento o desde que se produzca el hecho que origine el llamamiento, tendrá la dignidad de Príncipe de Asturias y los demás títulos vinculados tradicionalmente al sucesor de la Corona de España.
3. Extinguidas todas las líneas llamadas en derecho, las Cortes Generales proveerán a la sucesión en la Corona en la forma que más convenga a los intereses de España.
4. Aquellas personas que teniendo derecho a la sucesión en el trono contrajeren matrimonio contra la expresa prohibición del Rey y de las Cortes Generales, quedarán excluidas en la sucesión a la Corona por sí y sus descendientes.
5. Las abdicaciones y renuncias y cualquier duda de hecho o de derecho que ocurra en el orden de sucesión a la Corona se resolverán por una Ley orgánica.
Artículo 58.
La Reina consorte o el consorte de la Reina no podrán asumir funciones constitucionales, salvo lo dispuesto para la Regencia.
Artículo 59.
1. Cuando el Rey fuere menor de edad, el padre o la madre del Rey y, en su defecto, el pariente mayor de edad más próximo a suceder en la Corona, según el orden establecido en la Constitución, entrará a ejercer inmediatamente la Regencia y la ejercerá durante el tiempo de la minoría de edad del Rey.
2. Si el Rey se inhabilitare para el ejercicio de su autoridad y la imposibilidad fuere reconocida por las Cortes Generales, entrará a ejercer inmediatamente la Regencia el Príncipe heredero de la Corona, si fuere mayor de edad. Si no lo fuere, se procederá de la manera prevista en el apartado anterior, hasta que el Príncipe heredero alcance la mayoría de edad.
3. Si no hubiere ninguna persona a quien corresponda la Regencia, esta será nombrada por las Cortes Generales, y se compondrá de una, tres o cinco personas.
4. Para ejercer la Regencia es preciso ser español y mayor de edad.
5. La Regencia se ejercerá por mandato constitucional y siempre en nombre del Rey.
Artículo 60.
1. Será tutor del Rey menor la persona que en su testamento hubiese nombrado el Rey difunto, siempre que sea mayor de edad y español de nacimiento; si no lo hubiese nombrado, será tutor el padre o la madre, mientras permanezcan viudos. En su defecto, lo nombrarán las Cortes Generales, pero no podrán acumularse los cargos de Regente y de tutor sino en el padre, madre o ascendientes directos del Rey.
2. El ejercicio de la tutela es también incompatible con el de todo cargo o representación política.
Artículo 61.
1. El Rey, al ser proclamado ante las Cortes Generales, prestará juramento de desempeñar fielmente sus funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las Leyes y respetar los derechos de los ciudadanos y de las Comunidades Autónomas.
2. El Príncipe heredero, al alcanzar la mayoría de edad, y el Regente o Regentes al hacerse cargo de sus funciones, prestarán el mismo juramento, así como el de fidelidad al Rey.
Artículo 62.
Corresponde al Rey:
a. Sancionar y promulgar las Leyes.
b. Convocar y disolver las Cortes Generales y convocar elecciones en los términos previstos en la Constitución.
c. Convocar a referéndum en los casos previstos en la Constitución.
d. Proponer el candidato a Presidente del Gobierno, y en su caso, nombrarlo, así como poner fin a sus funciones en los términos previstos en la Constitución.
e. Nombrar y separar a los miembros del Gobierno, a propuesta de su Presidente.
f. Expedir los decretos acordados en el Consejo de Ministros, conferir los empleos civiles y militares y conceder honores y distinciones con arreglo a las Leyes.
g. Ser informado de los asuntos de Estado y presidir, a estos efectos, las sesiones del Consejo de Ministros, cuando lo estime oportuno, a petición del Presidente de Gobierno.
h. El mando supremo de las Fuerzas Armadas.
i. Ejercer el derecho de gracia con arreglo a la Ley, que no podrá autorizar indultos generales.
j. El Alto Patronazgo de las Reales Academias.
Artículo 63.
1. El Rey acredita a los embajadores y otros representantes diplomáticos. Los representantes extranjeros en España están acreditados ante él.
2. Al Rey corresponde manifestar el consentimiento del Estado para obligarse internacionalmente por medio de Tratados, de conformidad con la Constitución y las Leyes.
3. Al Rey corresponde, previa autorización de las Cortes Generales, declarar la guerra y hacer la paz.
Artículo 64.
1. Los actos del Rey serán refrendados por el Presidente del Gobierno y, en su caso, por los Ministros competentes. La propuesta y el nombramiento del Presidente del Gobierno, y la disolución prevista en el artículo 99, serán refrendados por el Presidente del Congreso.
2. De los actos del Rey serán responsables las personas que los refrenden.
Artículo 65.
1. El Rey recibe de los Presupuestos del Estado una cantidad global para el sostenimiento de su familia y Casa, y distribuye libremente la misma.
2. El Rey nombra y releva libremente a los miembros civiles y militares de su Casa.

12/23/2011

Nace el Rey de reyes.

"Si Cristo nació de una y mil veces en Belén pero no nace en tu corazón... te quedas un hombre perdido".
(Aurelio Ambrosio, obispo y Santo de la Iglesia Católica)

!!!Feliz Navidad¡¡¡

12/03/2011

No toques la pirindola



Ya es día 2 de diciembre. Hoy me tocará subir a trastero. Revolveré. Bajaré la caja de Navidad. Abriré todos sus recuerdos. Ojearé las felicitaciones que año tras año guardo. Albergaré todas las esperanzas que me gustaría ver cumplidas. La inauguración de los belenes y árboles debería tener más calado, algo más oficial y que corriera a cargo de algún grupo puntero y con garra, tipo “Camela”. Toda su fuerza para dar la entrada a la cuenta atrás del encendido e iluminación de las calles. Similar a lo que se hace en Londres, en Oxford St. Pero nosotros con nuestra identidad.

Ya tengo preparadas las cartulinas, tijeras, pegamento, hilo…todo. Y mis hijas esperan ansiosas. Participamos en las guirnaldas, bolas de colores que Elisa y Teresa verán cada mañana cuando la luz rompa la noche y sus cuartos sean ferias de ilusión por Navidad.

En esa caja bajaré las manos de mi padre organizándonos los espumillones- que tanto me gustaban y que tanto me gustan- Siempre un punto Kitsch. -, bolas, luces, pinos, tiras, cajas. Oiré de fondo ¡¡¡Josué!!! No toques la pirindola, que te la cargas con esas manos. Sí. Todos los años era así. Esa pirindola que era el colofón de un árbol y un nacimiento que año tras año, mi padre adornaba de forma distinta y siempre original. Y yo rompía, pero era Navidad y la casa por la ventana. Farra y diversión nos toman

En esa caja bajaré muchas más esperanzas. Quiero ver tantas cosas... Quiero disfrutar tanto… Recordaré los cónclaves que teníamos todos los años. Siempre alrededor de la figura de mi padre y el silencio y entrega de mi madre. ¡Quien podía con esa fuerza! Esas reuniones eran un motivo más, una puesta en común que facilitara la vida familiar en tiempo de adviento. Éramos una organización en horizontal: Unos elegían menús, otros adornos y los mayores se encargaban de confeccionar las cartas a los Reyes. Todos firmábamos las felicitaciones- muchas veces confeccionadas por nosotros.

En esa caja bajaré mi imaginación, impaciencia y mis ganas de ver la vida de colores y de alegrías venideras. Descubriremos un año más a SSMM los Reyes Magos que se conservan magníficamente. Siempre correctos y distantes como corresponde a su rango y cumpliendo su visita por Navidad- Cómo me gustaría que nos hicieran más visitas. … Despiertan gran admiración cuando ya comienzan con su recorrido desde el más lejano y misterioso Oriente hasta nuestras casas. Los vestiremos de oro estofados con perlas, para que las lágrimas sean pocas. Con piezas de hilo viejo, para que no nos falte un buen paño que vestir y cargados de buenas frutas y productos de la tierra para que nos cuiden nuestra salud. La alegría y el amor “El niño Dios” nos la da.- Eso si, hasta el veinticuatro tapado y/u oculto igual que los turrones. El Protocolo y los rituales marcan los tiempos.

Y de esa caja bajaré toda la magia necesaria para caminar con fuerza estos días entre números de lotería, participaciones, luces y bombillas- ahora de bajo consumo y tecnología LED y poca caspa. Es el momento del encendido de luces navideñas en la calle y en nuestras casas, refleja la llegada de las fiestas, visitamos mercadillos incluido el muy aristocrático de Nuevo Futuro. Y claro está, escribiendo los primeros renglones de la carta más deseada, con la que olvidaremos otras. Es el colorido y la alegría que trae consigo este tiempo de Adviento y de esperanza.

Este año incluiré y sumaré los colores de moda para nuestra Navidad: La plata el negro, dejaremos en una esquina el rojo y las velas – hemos abusado-. Aunque me temo que nos acompañará Caillou, Bob Esponja,Dora, Phineas y Ferb… Es lo que más me gusta. Estar de moda en los ojos de ellas. Que sus inquietudes sean las mías. Bajaré al “chino” y todo lo que se les antoje, es su tiempo y mi felicidad plena. Son ellas las que marcan el ritmo de mi corazón, la verdad es que estoy feliz, aunque tengo que reconocer que estoy derrengado. Y yo tampoco las dejaré tocar la pirindola. Ya veremos cuantas veces al día recojo el árbol…. Feliz adviento es muy posible que no me veáis disfrutando de la nieve en las estaciones de esquí, si acaso en alguna cacería propia de las fechas y sí merodeando el árbol.

11/19/2011

Intenta no lamer la cuchara

La cita era a las nueve de la tarde. Habíamos dicho adiós al calor sofocante, hiriente, que caía en nuestra anterior reunión del mes de Agosto. Ya dos meses desde nuestro último encuentro y deseábamos dar el cariño con el que se trata aquí a los buenos amigos. Parecía que nos conocíamos hacia 20 años, todo fluir. Muchas noches tengo que levantarme y decir ¡olé, olé y olé! y me digo qué suerte tener buenos amigos, siempre la mejor compañía. Todo preparado, nos visitan y ofrecemos lo mejor.

Un buen paseo por nuestra ciudad y toda la información turística facilitada por el Patronato de Turismo (¡qué despegue con Marisa y ahora…!) guías, monumentos, gastronomía, lo mejor de la casa. Pese a que “La caixa” en sus estudios informa que el bienestar en Zamora está en la cola. Yo no puedo estar más que en desacuerdo. ¿Pero qué variables toma? Ya me lo imagino: la temperatura el día 1 de enero, número de centros comerciales en pleno Lago de Sanabria y número de cines y teatros en Villalazán o algo similar. Hay un nivel de vida bueno, o como poco razonable. Mejor harían en quitar las comisiones, en vez de tirar el dinero en estudios. Y sobre todo que nos visiten fuera de Semana Santa, verán lo que somos, nada que ver con Blanca de Borbón, esa mujer tan vulgar que compite en un programa de televisión. Pero si además tenemos Club Náutico sin tener mar… Somos la leche.

Pues bien, ya tengo a mis invitados. Los recibimos en el Parador. Siempre amabilidad. Todo tiene que salir bien, hemos dedicado tiempo para que todo salga bien. Quiero que se lleven lo mejor de Zamora.

La primera cena en un restaurante que tiene un plato de oro y eso es siempre un aval. La distribución de los comensales en la mesa creó un ambiente muy cordial. Todo transcurría de la mejor manera que yo podía haber imaginado hasta que, de repente, la primera en la frente. El maître comienza con las suyas:
-¿Os gustan los espárragos? en Zamora los tenemos muy gordos…; situación chusca. Yo, me deshacía como un azucarcillo. Me estaba avergonzando y seguía, ahora, con el grosor de un espárrago y de cómo ingerirlo. Con un tono de lo más soez y vulgar: podéis compartirlo entre dos… Impropio y fuera de contexto siempre. No he cruzado dos palabras en mi vida con ese señor. Me arruinó la cena. ¡Pero si tenía un plato de Oro! y muy buena fama… claro que hace 25 años. No vuelvo. Y sobre la mesa sólo deben estar los elementos propios de cualquier mesa, nada de agendas, teléfonos móviles, ordenadores, pintalabios, etc. Que hay quien la toma como mesa de despacho o de cuarto de baño.

Nunca se habla con los comensales a menos que te lo pidan. Se olvidó de que el Maître debía ser el maestro en el arte de servir. El creador de un ambiente idóneo para el cultivo de una gran amistad, negocio…todo menos estorbar. Su deber es evitar molestias e inconformidades, crear un ambiente cordial de discreción y honestidad y fue un metepatas. La persona que no cumpla con esos requisitos no puede permanecer en el puesto. El restaurante es el que perderá, porque jamás regresará el cliente. Yo no he vuelto. Nunca discuto. Hubiera preferido tomar un emparedado caliente de york y parmesano en casa. ¡Sin duda!

Este hecho me viene a la cabeza, para pensar que no todo es posible en los restaurantes. Claro, que a veces quienes los frecuentan son peores,… ¿Triunfadores? No, porque por su formación y buenas formas no lo sustenta, y no, porque intentan con su dinero coger unos cubiertos y unos modales que no tienen. Además están encantados con que les llamen caballero y dama. No podemos pedir a quien no recibió.

La comunicación con los comensales tiene que ser clara y agradable. El despropósito y una mala formación, amén de los temporales pueden acabar con la reputación de un restaurante. El trato inapropiado y no me refiero al tuteo, sino a determinadas licencias, como dirigirte preguntas e intentar establecer conversaciones sin tener un porqué..., las malas caras..., no hace falta que te llamen imbécil, pero casi. -Por favor, una coca Light- y te sirven una normal. No, usted no me dijo…y sigue…y discutiendo… una mala noche la tiene cualquiera, pero yo no tengo la culpa.

Jamás debe oírse, en la mesa de un restaurante, la pregunta de ¿para quién las judías? ni la de ¿ha terminado el señor? un camarero conocedor de su oficio sabe si un comensal ha acabado o no su plato y toma buena nota en su comanda de la situación. Hace falta celo, humildad y profesionalidad. Mucha gente cree que servir una mesa es una cosa muy sencilla, que puede hacer cualquiera y en un momento. Un error, es cuestión de oficio y tiempo, siempre calladito, mucho mejor. Y no me espetes dos besos, que no te conozco de nada.

Pliss, los manteles se dejan de usar cuando se ve la trama. Recuerdo un buen restaurante que lo es y qué mala imagen... con esos manteles blancos en las últimas. La cubertería limpia, pero intenta no lamer la cuchara, el tenedor o el cuchillo cuando están sucios después de usados. Algunos con tal de brillar, lamen sin parar, eso es estar rabiosamente en offside. Ahora, casi opto por una cena sencilla en casa. Pero sin pasarse, no puedes recibir a nadie con una patata frita. Él éxito de una cena está en la comida y en la conversación. Cosas que gusten a todo el mundo y las personas adecuadas, que es lo más difícil: con una educación bárbara, con una gran cultura y un corazón inmenso, esos son todos mis amigos, pocos, pues las exigencias son muchas. ¿Te apuntas?

10/26/2011

A tumba abierta







Hace tiempo que sé que en el mes de noviembre se pone la noche. Los puñales de plata bajan en busca de lo suyo. Siempre reflexiono sobre la vida y la muerte, llega la luna y damos la espalda al azahar. Las trancas echadas. Cerramos balcones y ventanas, cortinas cerradas, entonación de la puerta. Es hora de oscuridad. ¡Cuídate!

Hoy incluso me atrevo e imagino mi catafalco expuesto y abierto, vestido con mi túnica gris desdibujada de la cofradía de Jesús Nazareno. Aunque no descarto el terciopelo rojo del Silencio- poco apropiado para la ocasión, pero tan alegres para el nuevo camino- lo tengo que pensar.

El lugar elegido podría ser el Palacio de Cibeles, que tan de moda se ha puesto para organizar eventos, si fuera en Madrid. Tendré que dejar una asignación para este tipo de eventos pues por muy “pepero” que sea, nada es gratis. Y si fuera en Zamora; algo austero pero contundente. El convento de las Clarisas “El Tránsito”. Sor Mercedes rezará por mí, no lo dudo. Ella es buena y generosa, vida contemplativa por los demás. ¿Quien da más?.
Hijas, no me dejéis esa noche, velarme, que eso debe ser horrible, todo lleno de almas sin descanso… nada, aguantar como sea. Lo mejor para acompañar y levantar el ánimo una cubitera con hielo, gin y agua tónica, siempre ayuda y levanta el ánimo y no al muerto, y de vez en cuando miráis por si acaso.

Recuerdo a mi padre contándome unas exhumaciones…. –muerto de miedo y lleno de esperanza- y cómo su tía estaba incorrupta y aseveraba: ¡¡¡prueba de santidad!!!, era una santa, sufrió mucho. Con los años he ido perdiendo miedo a la muerte, no del todo y sí a los muertos. En uno de esos paseos por el cementerio de San Atilano, recuerdo a unos señores haciéndose una foto con otro incorrupto en la tapia… sí, lo que estáis leyendo: exhumación para foto de familia, ahora y por fin completa. Uno tieso con ropa pegada y los demás dando vuelta a su alrededor en distintas poses. ¡¡¡Creedlo!!! Por supuesto, que salí corriendo.

Llega la hora de las despedidas, ¿quién le quita la cruz, el reloj y la alianza? ¡Y las prótesis de titanio!... ¡¡¡ una pasta en el mercado, las piezas dentales de oro!!! Se arma la mundial en un momento, todo corre. Se va, pero todo esto ya no lo necesita y en un momento…. Visto y no visto. Rápido desaparece el objeto. Pío, pío que yo no he sido. Alguien de mi familia tiene una magnífica pulsera con piezas de oro que es la envida de cualquier acto social. Lo que ya no sé, si también deja la pulsera en “Corega” por la noche e incluso si tiene restos… pues ya seria un problema para el engastador.

Y después, la ceremonia y camino hacia el mas allá. Para la eucaristía dejaré escrito que las señoras tengan que ir con traje de cocktail (negro o blanco e incluso alivio) y los señores de oscuro. Estoy hasta los mismos… de ir a funerales y ver que la gente va vestida como para ir al supermercado, ¡¡¡ joder!!!, que es una despedida casi solemne, no vengas con la chancla, el vaquero y la camisa abierta… respetemos las tradiciones y las ocasiones. Dignidad.

Por favor, dejad un lugar destacado y digno para S.A.R. Doña Elena- ya la veo con su pelo recogido en forma de trenza- que seguro que me dice adiós y de fondo esta vez que suene Jeanette, “Porque te vas”. Doña Elena lo aprobará. Ella es fantástica. Ofrecer una coca cola light a S.A.R – le encanta y lo disfrutará.

Todo preparado, un funeral completo, agua bendita derramada sobre mi cuerpo pecador, con ataúd y coche fúnebre dignos-, ¡Qué pena de coche de caballos! Me gustarían misas y más misas y quiero “las gregorianas”. Nada de tres, eso y nada es lo mismo. Tengo mucho que penar. Todo será poco para paliar mi soberbia. Pocas flores y muchas oraciones. No tengo ganas de andar penando por cualquier casa de la rúa de los francos en busca de descano y oración. Mejor todo seguido. Nada de una limusina para trasladar a los familiares, seria un gran disgusto, en mis últimas horas algo tan hortera y además no es muy chic.

Efectivamente será ver la luz eterna, disfrutar de la presencias de Dios eterno, pero pese a que para los católicos es y se supone un día feliz, No hace falta ni arroz ni pétalos para festejar la despedida. Y sí una oración para que San Pedro esté alerta con todo abierto y nos abra rapidito, no tengo ganas de perderme por el camino.

Tendré que pagar por ser a veces divertido y otras un sieso e intolerante a más no poder, como corresponde a mi carácter casi bipolar o ciclotímico. Cien por cien vanidoso, sin embargo, según apuntan los que me conocen, servicial, generoso y sentimental, que no semental. Creo no ser caprichoso, pero si amante de lo bueno cuando puedo. Intentar que no caiga en el ostracismo total y absoluto, recordarme.

Lo veo, y me encantarán los corrillos de noticias tristes:
-¿Y como ha sido?
-Desgraciadamente ya no está entre nosotros,
-Parecía que estaba estabilizado,
-la noticia me sorprendió… es así, la vida es llegada y partida. Lo malo es la alteración de la normalidad, las despedidas a destiempo. Son losas inmensas. Imposible levantar. Llenan la vida de tristeza, agonía y desesperación. Lo dulce es amargo, imposible de digerir.

Confiemos en la bondad y la misericordia infinita de Dios. Y en San Pascual Bailón, que me avisará tres días antes. Lo único seguro es que el viaje está totalmente organizado y cerrado. Varía el momento. Yo lo tengo retrasado por mucho, mucho tiempo. Tengo mucho que disfrutar y poco por sufrir. Como en casi todas las fiestas la comida toma un papel principal, así que estos días huesos, buñuelos y dulces de piñones para nosotros y para ellos lamparillas, agua, fuerza para que continúen el buen camino.

10/13/2011

Es ella y su caminar aristocrático


Coincidí con ella en la confirmación de un sobrino mío y uno de sus hijos. Según pasó me arrastro. La gente no se levantaba cuando entraba ella- No lo entiendo- .Sabía de ella, de su pasado. Era lo que imaginaba, clara, limpia y tocada por la “A” mayúscula de la elegancia, el saber y el espejo en el que las mujeres debían mirarse. Nada de gafas de sol, ¡deslumbraros!; es la feminidad, la delicadeza y la grandeza; la fragilidad y la fortaleza. Y su collar de perlas mi perdición. ¿Algo más morboso y sensual que un hilo de buenas perlas...?Lo dudo.

Deseo manifestarle mi admiración y no sólo por ser guapa, que lo es, ni por ser punto de mira para los hombres que nos deslumbramos ante su belleza, feminidad, delicadeza y naturalidad. En su caso, quizá forjadas por los sinsabores de la vida. Es el fuego que nos funde con su sensualidad. Muchos querrían una mujer tan encantadora, tan bien vestida y tan culta como ella. ¡Qué ojo el de Christie’s! Esa es la obligación de las grandes cazatalentos o “headhunters” de las empresas: fijarse en ella. Y que todo su talento innato sea beneficio para todos.

Leyendo el libro “Duquesas” de José Miguel Carrillo de Albornoz, he descubierto que estudió en las Esclavas de Martínez-Campos, ¡Si lo hubiera sabido antes…! hubiera paseado aún más por ese colegio tan arraigado a mi familia. Comprendí que era ella la que otorgó ese halo magnífico al colegio. Espero que las profesoras se fijaran y se vieran influenciadas por ella, para que las alumnas de sucesivas generaciones, en su medida y salvando todas las distancias adopten el decoro en su imagen, el saber estar y el no molestar nunca, como lo hace esta antigua alumna. Ella es el máximo exponente de la naturalidad y la armonía. Los pantalones vaqueros no pueden ser más elegantes y sobrios que en ella.

Me río yo de los cursis y de los “iconos” de las buenas maneras, ella es la viva imagen en la que fijarse. Su caminar aristocrático, su mirada firme son el temario que deberían tener todas las escuelas de negocios.- ¿La podríamos declarar bien de interés General? ¿o Cultural? ¿o Artístico? ¿A qué esperamos?. Y jamás lleva marcas visibles en su indumentaria- tomen nota-. Siempre Guapa.

La Princesa de Asturias, por el bien de todos nosotros (sobre todo por la Monarquía, símbolo de la unidad de España y de la imparcialidad) debería invitarla a tomar un té en palacio. Entendería lo que es la naturalidad en estado puro. Se ahorraría tanto tiempo, que podría aprovecharlo para ir mirando colegio para nuestras Infantas, incluso ella podría aconsejarla. No entiendo el complejo,- con todos mis respetos, de la casa Real de prescindir de su “corte”, pero no de los asesores y gente interesada. Estos si que sobran. Y no aquellos que sirvieron a la causa monárquica de forma desinteresada y entregada. La Reina está exenta de todo. Es elegancia clásica y nuestro orgullo, para envidia de cualquiera de las recepciones de Europa.

Sí, con ella se acaban las mediocridades en las que muchos viven. Ella es luz y frescura, es la tetera de plata, el blanco inmenso y nunca el grito. Mujer impensable, pragmática y entregada. Siempre mirando al frente. Derrocha ternura y amabilidad. Amante de la vida y seguro que de mi pequeña colección de licoreras de cristal.

Para ella, el mal tiempo y los contratiempos no avanzan. Siempre compostura. Es el árbol que da sombra a las buenas formas. En mis momentos bajos la observo detenidamente y es un resorte de energía y últimamente mi obsesión (por eso este post). Ante la adversidad ella. Y ella es La duquesa de Fernandina, Pilar González de Gregorio y Álvarez de Toledo. Realmente es una maravilla cómo se expresa y con qué naturalidad y simpatía lleva su ducado. Seguro que detesta el novedoso invento de la botella de champagne con la copa incluida en la misma botella. ¿No lo crees?

Pincha y verás. http://www.rtve.es/alacarta/videos/comando-actualidad/comando-actualidad-zona-noble-duquesa-fernandina/1216259/

9/22/2011

Duquesa, sí quiero



Existe o tenemos la costumbre de que la mayor parte de las bodas se celebraban en primavera y verano y no es para menos. Es gloria bendita lo que se ve por la calle. Colores e ilusiones todos. Las calles son tomadas por petardos, tracas y demás algarabías.

Vestimos con sentimiento y emoción. Desde las poliamidas revestidas de deslumbrantes brillos, hasta las buenas alpacas y los fructíferos nailon y como no, las buenas sedas… Queremos nuestro mejor aspecto, que van desde lo más elegantes (generalmente pasan sin llamar para la mayoría) a lo más preciado del low cost, el pret a porter de luxe, el sotogrande de perlón y todo lo que queramos ¡Estamos de boda! Que no se quejen los anfitriones por las vestimentas algo casuales.

Las rúas de Zamora son un hervidero de jóvenes “young looking” alzadas sobre inmensas plataformas y tacones. Es todo exceso y juventud. Balcones de inocencia abiertos para todos. Hay que darlo todo. Es la ocasión y seda sobre seda.

Ya sabéis que soy bastante observador. Creo que la gente confunde una boda con una fiesta. Una boda es un compromiso, es sensatez, es un consorcio de entrega libre y conlleva las amonestaciones públicas que hace la iglesia a fin de que, si alguien supiere algún impedimento, lo denuncie. Es decir, es un paso importante en nuestras vidas. No me extraña que muchos no lo intenten… te acojonas en un momento. Pero merece tanto la pena… y no sólo por olvidar el voto perpetuo de castidad.

Una fiesta es exceso, es tramoya, es diversión, es pasajero, es regocijo, es recreo, es chanza, broma, es efímero... es gente de todos los círculos sociales y de todo tipo alrededor de un buen vino, gin…Nuestra puesta en escena, por tanto, tiene que ser distinta, vestidos, trajes, adornos, aspecto, presentes, han de ser distintos y diferentes.

Me sorprendo con los trajes negros en los hombres. Plissss, que Amador sólo hay uno. Desechar ¡ya! Gris y azul siempre y en toda su gama, los azules, (las cosas raras para las fiestas) En verano, incluso veis, tostados y cremas para el hombre. Las corbatas… Parece que no es nada y es todo. Buena caída, el nudo ha de ser el adecuado para la ocasión y para la papada; Shelby, doble, Ascot y siempre el Windsor. ¡Ojo!, Las tendencias pasan rápidamente para las corbatas incluso en días y pasas de ser a parecer. Las camisa al gusto, eso sí, evita los cuellos con botones para lucir con corbata. No es el día, ¿no te parece?

Capítulo aparte son las gafas de sol de los señores en las bodas. Mejor estarían en la guantera del coche. Evitarás que te comparen con matones, poligoneros, guardaespaldas de la novia, escoltas de película de segunda. ¡Que miedo! y que inoportunas para estos actos. Déjalas para tomar el aperitivo el domingo. Mucho mejor. No son nada chic.

Los zapatos de cordones y negros son los más utilizados y los más clásicos, aunque últimamente toman fuerza las versiones italianas de “chúpamelapunta”, los pseudos serpiente. No. No están mal los que tienen antifaz, borlas, hebilla y otros modelos similares… que para el que le guste esta fenomenal, pero son poco formales. Eso sí, cálzate a gusto y no los estrenes ese día. Es espantoso estrenar zapatos en una boda (ellos).

Punto y aparte son las señoras. ¡¡¡Tachán, tachán….!!! Encajes acrílicos que no superan la prueba de fuego, riesgo de perecer achicharrada, drapeados romanos, largos por los pies y un poco más. Y con las manos recogiendo los laterales de los vestidos ante la inminente quiebra del equilibrio por ser auto-pisada…Hay que evitar los excesos, por ganas que se tengan de emular a Tania Doris, Norma Duval o cualquier vedette de éxito. Evita las lentejuelas, plumas y diseños más apropiados para fiestas. La última decisión está en su mano, ser atrevida, clásica, descarada, divertida, o numeraria... o una combinación de todas ellas. Es tú opción, hay normas fijas, apuesta por el buen gusto más que por la moda. La Fotografía puede traerte disgustos pasados los años.

Creí que la laca y los hiper cardados habían desaparecido. Esas melenas tiesas. Moños como merengues, caídas en cascada… Mucho mejor lavar y peinar. Olvídate de cosas raras que luego no te reconocen. Acariciar una melena con todo eso, puede ser terrible- Tener la sensación de una mano llena de pegamento y no saber que hacer puede arruinarlo todo. Di adiós a los tirabuzones, muéstrate lozana y andaluza:- si quieres. Te puedes llevar la sorpresa de algún zafio que te diga ¿Dónde te has metido? Que los hay.

Y sobre todo procura en los corrillos no comentar: ¿Será la definitiva? Nunca se sabe quien puede estar cerca. A pesar de lo mucho que sufro cuando veo los desfiles hacia las iglesias románicas, ¡me merece tanto la pena!… me gusta la gente, es la vida, son libros abiertos, es impresionante, y cuanto más estrambótico mejor. Ese soy yo, lo clásico y lo kitsch. Cayetana, estaré a punto para el 5 de octubre. Es mi día, la duquesa y yo tenemos a gala tres cosas: ser católicos, monárquicos y españoles, lo demás… aire.

9/10/2011

Te reciben según te presentes




Te reciben según te presentes

Ya sabes, pon tu mejor sonrisa, ánimo y atención. ¿Quién puede ser? ¿Quién puede estar? Y cuánto habrás ganado. Mejor ser recordado con una sonrisa que por tener cara de retrete.

Debemos mostrar nuestra mejor cara siempre y si no es así, debemos hacer un esfuerzo. El de enfrente no tiene la culpa de que el Madrid haya perdido, de que no sea nuestro día, o de que mi mujer tenga dolor de cabeza… No. Nunca sabemos la repercusión que puede tener ese mal gesto.

Aseguro y creo que casi es peor el que cambia su expresión a medida que se entera de quien es el de enfrente. ¡¡¡ Interés!!!, lo peor. Le darán la vuelta. Su cara quedó al descubierto. Y sus cartas en la mesa. La farsa esta servida. Adiós, mamarracho.
Mucho mejor actuar y comportarse ante los demás con simpatía y buena cara. Piensa que estás instalado el photocall de tu vida. Comunica buenas vibraciones, el éxito te espera. Es el mismo esfuerzo poner buena cara que mala y el resultado totalmente distinto. Primer paso ganado. E incluso puedes olvidar el botox por una temporada
Recuerda y no te olvides de la comunicación verbal, si te preguntan no contestes sólo con monosílabos, puedes parecer más imbécil de lo que ya eres. Abre tu casa con tus mejores galas y viste más Preppy que nunca. Tus cimientos son fuertes. Construye despacio y buenos materiales, con habilidad y discreción. Evita a Felipe Varela. Esta reservado.

8/23/2011

Sueña con el Palacio de Marivent (que sin D. Jaime está bastante más soso).


Cuando salgo de mi casa en vacaciones, busco un sitio tranquilo donde descansar y poder disfrutar con la mejor compañía. Mi familia, amigos y en un ambiente familiar. Buenas intenciones. Una vez subidos en el coche comienza la batalla psicología.- ¿Cuándo llegamos? ¡Por Dios ¡ que estoy en la puerta del garaje y me quedan 800 kilómetros. Me quedo impávido y sin reacción.

En la recepción, nos dan todo tipo de explicaciones sobre normas y funcionamiento del hotel. Algunos, creo que en esos momentos ya deben estar buscando los prismáticos para disfrutar del los paisajes siliconados. Todo menos prestar atención, así lo demuestran sus posteriores comportamientos. Ya estamos instalados. Momentos cargados de emoción. Ya está el agua para los segadores. Saciémonos de felicidad.

¡Buenos días! Ánimo - para unos si, para otros no. Muchos deberían pasar por algún otorrino de urgencia (que pueda extraer esos terribles tapones que le impiden oír), o mejor, ojear algún libro de urbanidad. Desgraciadamente, los veraneos ya no son lo que eran. La gente hacía un esfuerzo por mostrar la educación que no tenían. Hoy, ni eso.

¿Dónde quedan las normas básicas de urbanidad? Y no es que me interese para nada esa gente, es que creo que en la sociedad sobran. Reconozco que algunos pueden reventarme el día. Qué necesidad tendré yo de encontrarme con gente así. A los hoteles en vez de por estrellas se debería clasificar/acceder por niveles de comportamiento/educación: poco, mucho, nada… y todos tan felices. Y no se puede copiar en el examen de ingreso, que luego vienen las sorpresas

También me llama mucho la atención- soy muy observador- la cantidad de gente que pierde cosas… todo, menos mirarte a la cara cuando te cruzas. ¡Convivimos! Deja de mirar al suelo cuando te cruces con alguien. Simplemente limítate a sonreir y poner cara de interesante cuando pases a cierta distancia con las mismas personas todos los días. Deja atrás la timidez, y/o la mala educación. Y si no, quédate en tu casa con un refresquito de limón y sueña con el Palacio de Marivent (que sin D. Jaime está bastante más soso).

Es hora de liberar tensiones acumuladas, por favor, silencio. Después del verano llegan las algarabías señoriales y las bodas ducales. Pero ahora no. Pido descanso y respeto. Me pongo el cartel de no moleste en determinadas horas, conocidas por todos. Caigo desmayado en las siestas estivales. ¡Pierdo la consciencia! Me dan la vida, salvo que algún cabroncete no respete esas horas tan sagradas.... Ayer muchas risas, mucha juerga y he dormido poco. Dejadme descansar.

También es terrible encontrarte con gente que no para de preguntar y de hablar de sus experiencias…. Aprendes muchísimo. Viajas en un momento por el Caribe, China… y en otros momentos por la familia de alguno. Sería mejor un alarde de magnífica educación y gran sentido del humor, pero creo que no es el momento, continúan por sus viajes por Berlín y las andanzas del primo número uno de su promoción- (cuánto número uno hay en la vida de los demás…). Claro, que lo prefiero a los que en los desayunos zambullen todos sus dedazos en la taza de café. Como si tuvieran que superar una prueba de supervivencia con un objetivo: ¿Cuántos dedos te caben y hasta dónde? Por favor, comienza bien el día.

Sí, comienza bien el día y viste para la ocasión, el traje de baño es para bañarse y no sirve como comodín para todo. No, no y no. No puedes ir a desayunar, comer, cenar y de paseo al Corte Inglés de Banús con el mismo traje de baño floreado. Es preferible pese a todo, cualquier otra vestimenta. No hacen falta buenos trajes, pero si buenas intenciones y respeto a los demás. No todo vale, o eso creo yo. Todos tenemos ganas de aprovechar este tiempo.


* De todo esto, sólo se libran de pecado los jóvenes, a los que se les permite incluso que no me dejen dormir, pero nadie más.

7/14/2011

Los museos y el más allá


Es de agradecer que con el buen tiempo puedas saborear, a la vez, un buen vino y un tapiz de Amberes, siempre y cuando las humedades no han hecho mella… Tendría que ser así siempre. Abrir puertas, ventanas y negocios a los nuevos tiempos. Los museos deben crear una línea de negocio nueva. La sociedad lo demanda. Estamos hartos de los mismos sitios. Imagino poder alquilar mediante contrato un lienzo, una escultura, un retablo… para una cena, una fiesta o una orgía. ¡Magnífico!

– Buenos días. Museo Herreriano, le atiende Atilano, departamento de alquiler de obras–. Buen negocio ¿verdad? Creo que es una forma estupenda de abrir nuestras reservas culturales, tesoros, pinturas, recuerdos, curiosidades... –Traigo su Canaletto para la cena. Mañana lo recogemos. Por favor, no me tire la caja y no me fumen mucho que coge olor–.
Aplaudo las ideas que desde hace varias temporadas, y con una visión estupenda, desarrolla el Museo Thyssen-Bornemisza en verano. Retrasar la hora de cierre, una terraza y estupendas presentaciones guiadas. Sólo faltan las celebraciones familiares. Será lo próximo. Una vez que se dé el primer paso será un no parar y romperemos con el concepto habitual de este tipo de actos, en lo que a alojamiento y estética se refiere. El primero que “caiga en sus redes” conseguirá un éxito seguro. No hay nada que resulte más alentador que llegar a un museo y sentir que formas parte de él. Esa sensación es la de pertenecer a lo sublime y más exquisito. Tú lo eres en ese momento, compartirlo puede ser fácil. Sólo nos falta que todos los museos se presten a ello y nos ofrezcan esta nueva oferta cultural y social.

Por ejemplo, celebrar un acto familiar rodeado de pasos de Semana Santa y con menús en sintonía: sopa de ajo, cordero pascual, aceitadas y torrijas…. Sería….Pintoresco. Y como hilo musical…. “Dolor de Madre”. No me digáis que más de uno no se apuntaría. Ya imagino a la sociedad local, ésa que se dedica a hablar de las venturas y desventuras del corazón de los demás rasgándose las vestiduras. Olvidándose de lo que tienen en casa. Y los nombres de las mesas….

Empiezo y no termino:
Mesa 1. La Verónica.
Mesa 2. La oración del huerto.

Podemos ir “más allá”: un pequeño almacén de búcaros y urnas funerarias. Una sección que formara parte del museo. Los fanáticos nos quedamos como amigos del museo y asociaciones colaboradoras. ¿Quién no conoce acérrimos seguidores de todo? Del Betis, del ejército, de… dispuestos a pagar por esos servicios y descansar eternamente y en paz con lo más amado en la vida terrenal. Encima ayudan al mantenimiento.
No es el primer caso que oigo y veo que tienen la cenizas de un ser querido u odiado en casa. Pues, por un poquito al lado de las Meninas… y cada primero de noviembre a visitar a los seres queridos pasando por caja.

Falta camino por recorrer. Pero, llega ya, ahora o pronto. Advierto: será el escenario ideal para adulterios, romances apasionados, recuerdos imborrables, fantasías frustradas. Para algunos lo más. Deshacerte a besos tras los cortinajes del Museo Lázaro Galiano. Soñad, que pronto es realidad.

Y al final, en vez de la enhorabuena y buenaventuras del “maître” o del director del hotel que fueran la duquesa de Alba, la baronesa Thyssen (Autenticas profesionales. Siempre amables, educadas, nunca se agobian por las fotos ni por los autógrafos, a pesar de llevar una agenda apretadísima.), incluso Tamara Falcó junto a su novio Tomasso Mussini quienes nos brindaran las bendiciones, enhorabuenas y la despedida. Claro está, bajo un contrato de imagen, que lo mismo te deja colgado. Todo, con una sencillez rompedora y como si estuvieran por casualidad. Brotarían los murmullos y frases tan manidas como…. "Es sencillísima, muy de andar por casa, éramos muy pocos, mucho mejor en persona, ¿cómo fue?"...

Los museos deberán incluir un apartado de actividades sociales con unos objetivos estratégicos. Crear nuevas experiencias de calidad para los visitantes, fidelizar el público ya existente y los nuevos vendrán solos. No me diréis que el escenario no puede ser más folclórico. Yo estoy saliendo a pedir cita al museo Museo Catedralicio de Zamora para cenar unas croquetitas con los tapices.

6/08/2011

Y sí, la vida continúa



Estoy tranquilo. Después de la tempestad viene la calma. Y después…Siempre algo mejor. No lo valoramos, pero viene y vendrán cosas mejores. Unas no las veremos y otras sí, pero las intuimos. Siempre se muestran con una cara o con otra. Sólo hay que estar atentos y preparados. Las musas vienen y no avisan, que te pillen preparado.

Por desgracia, el tiempo pasado no vuelve. El fin de semana ha sido malo, nervioso, en un estado de agitación tranquila, ya han pasado las noches complicadas. Templanza, cocinar en frío y bien rodeado. La vida es para tomarla en frío. En caliente todo hierve; el ambiente es tan tenso que es campo abierto para la navaja. Mejor, mucho tiempo y tranquilidad. Olvidemos la venganza. Florece lo mejor. ¡Quiero ser oriental! Silencio, muecas de amor. Nada se tiene decir y todo esperar. Le damos mucha importancia al “qué dirán” dependiendo de la edad. Hasta los veintitantos sufrimos por la opinión que puedan tener los demás de nosotros, luego con veintinueve –que son los que tengo yo– “te pones el mundo por montera” y te da igual todo. Sí, ya llegan las buenas vibraciones y los horizontes llenos de cosas buenas. Lucirán los conocimientos, como un magnífico broche de brillantes. Dejémonos llevar por el resplandor de la imaginación, de los sueños y de las ideas. Lo más importante, destaca, es el sentido común. De momento son buenos alimentos para nuestra salud mental.

Me siento una persona muy querida. Y sí, la vida continúa y mucho mejor. No dejes de acompañarme. Para mí tus consejos siempre han sido santo y misal y te lo contaré con un arreglo de flores en mi cabeza.

5/25/2011

¡¡¡Un entrenador personal!!!


Sí, voy a contratar a un entrenador personal y a un perfeccionista. Con la práctica de ejercicio y una buena dieta, rápidamente estaré fenomenal, como para un papel en una película. Estoy dispuesto a hacer todo lo posible para lucir un cuerpo tan estupendo como los Celebrities; puede ser la clave de mi cambio de imagen, que ya estamos casi en junio. Ya me imagino: "¡Josué! Vamos, arriba... soy tu nuevo entrenador personal". No puedo perder el tiempo. Máxima rentabilidad. ¡Vamos, vamos, tres flexiones y otra tres más! ¡Por Dios! que te pilla el verano. Suda y ponte en forma. Que la semana próxima tenemos fiesta. ¡Es verdad!, el doble de ejercicio.

Sí, ya llegó la invitación más taurina y diplomática de todo el año. El mundo del toro se reúne en la residencia del embajador de Francia. Me preparo para la fiesta. Dejaré el zapato castellano y el vaquero de talle imperio y espero que la tripa… ¿Y la camisa polera? También. Está de plena moda. Pero no es el momento. El terno será de color azul oscuro para la noche. Jugar seguro en junio. Últimamente, se ve, por fin, que la gente sabe adónde va. Adiós a la época de ir disfrazado, como para recoger un Goya, –es decir, con lo peor de casa y recién levantado de la cama, después de tres días tirado–. Adiós al look de marrano y ellas, si pueden, adiós al vestidito floreado acompañado de rebecas (muy popular) de manga tres cuartos, que está “offside”.

Jardines y rincones de Francia en pleno centro de Madrid, abiertos a los toros. La luz ronca de “las Ventas” se cuela hasta el jardín y cuando atravesamos los muros de la residencia, a la hora del bufé y del gran refinamiento culinario de Pocheville, conviene no perderse y no perder la compostura. Con la copa en la mano, sale lo peor de cada uno, remolinos y más que corren de mesa en mesa, "¡¡¡Allí están las ostras!!!" Da asco. Yo, rápidamente llamaría a seguridad y de patitas a la calle. O mejor… a un Burger. En esos casos y con esas aptitudes me dan ganas de empezar a repartir…. Prefiero situarme en la soledad del comedor con un emparedado caliente de pavo y parmesano acompañado de una ligera ensalada. Huyo de la manada. Es de esperar –y crucemos los dedos– que la gente se comporte. No hace falta ser tan fascinante como la Jequesa pero respetamos los espacios y a nuestro anfitrión.

Me gustan las fiestas, quizás herencia familiar. De pequeño, cuando mis padres salían de fiesta, yo lloraba todos los días: quería ir. Actuaba de ayuda de cámara de mi padre; le sacaba el traje, la camisa, la corbata, los zapatos, los gemelos… El último toque era: la colonia. Quería ir/estar con ellos. Todo era fascinante. A la mañana siguiente eran todo preguntas. Siempre escuché y aprendí que mejor seducir con una sonrisa. Allí y así he sido y soy muy feliz. La única obligación que tengo en mi vida es la de mejorar a mi padre (será y es imposible) y luchar por mis hijas, y porque sean mejores que yo... eso lo tienen fácil. Son mi orgullo. Éxito, dinero y reconocimiento no quiere decir que seas el más feliz. La felicidad te la da la tranquilidad…y eso sólo es posible de vez en cuando y con mis hijas.

¡Ojo! con los camareros de los catering: los platos se retiran por la derecha y es recomendable pasar también un recoge-migas para dejar la mesa un poco más limpia. A partir de ese momento, ya tenemos la libertad para levantarnos de la mesa, conversar sobre toros y observar los magníficos tapices Aubusson que cuelgan de las paredes… y a aprender. Las servilletas como si fueran sábanas. Compórtate con naturalidad y evita la afectación amanerada, tanto en el comer como en la conversación. Piensa que la sencillez revela un mayor grado de cultura.
¿Seré exhibicionista? Pues a lo mejor, yo quiero expresar lo que siento. Digo cosas que nunca me atrevería a decir a la cara, pero, por eso, escribo con letra inglesa.

5/18/2011

Mi primera vez


Mi primera vez
No recuerdo ni bien ni mal si fue con 6,7 u 8 años. ¿En mayo? Lo dudo; conociendo a mi padre, seguramente junio, julio o diciembre. No lo sé pero hacía buen tiempo. ¿El año? ¿quién lo sabe? Sí sé, que lo hice por el rito ortodoxo y en el hospital Generalísimo Franco. Entonces, ya las primeras comuniones no eran obligatorias por las mañana, previos ayunos nocturnos. Fue por la tarde y con calamares a la romana… Sueño todavía.

Ahora me pregunto ¿Estaba yo preparado para recibir por primera vez el cuerpo de Jesús? ¡¡¡Era un niño!!!. No sabía nada de nada. Quizás eso era lo mejor. La inocencia, las ganas y un mundo como el que describía el Padre Coloma en Pequeñeces. Sencillez y bondad. No hubo catequesis y sí una primera confesión en el salón de casa. Ése fue mi primer acto de penitencia. Sudaba y soñaba con ser mejor y con presentarme limpio de pecados. No hay nada peor que un pecador. Bueno, quizá un consumidor de pastillas.

Mis recuerdos son de cabeza, en papel no tengo nada. Soy el séptimo de los ocho hermanos y ninguna foto. Creo que de algunos de mis hermanos mayores podemos tener alguna foto, pero del medio para abajo… Nada de nada. Eran otros tiempos. Las emociones en la cabeza. No es como ahora que hay de todo: cámaras digitales, móviles, dispositivos…. hoy no te libras de que te retraten con todas las muecas posibles… te deja perplejo. Acostumbrado como estoy a tiempos del pasado hoy deslumbra el despliegue de medios.

Reconozco que me encanta sentirme acosado por los paparazzi en mi propia casa ¿Imagináis? Y luego verme en la revista ¡Hola! Aunque últimamente ya no es lo mismo, ya no me hace tanta ilusión (miento, siempre la hace) desde que salen y me aburren los Thyssen-Cervera, los alcaldes horteras y corruptos. Por favor, volvamos a la línea editorial de siempre, adiós a Borja Thyssen, familias reales de Ubrique, a zafios y horteras a los que abomino, odio y execro. Me enloquecen todas sus actitudes y vagancias.

La capilla de mi primera comunión era discreta y solitaria. Sor Damasa lo tenía todo preparado. Allí me presenté de blanco y para muchos días. No hay nada más elegante que el blanco y limpio. La pena es que dure tan poco. Yo no entendí nada de la liturgia, de la celebración… Fue en latín, el sacerdote de espaldas. Pan y vino de casa de mi padre para mi primera comunión. Pero pese a esa ignorancia, prendió en mí un sentimiento de responsabilidad. Busqué desde entonces un examen de conciencia diario que me hiciera reflexionar sobre el bien y el mal. Me permite seguir feliz y buscar lo mejor de mí día a día. Huyo de todo nihilismo. Lo rechazo.

Los días previos, mi padre me dijo que pensara y escribiera frases sobre mi primera comunión. Yo seguía sin saber nada. Oía, escuchaba y callaba. Hasta que en las tarjetas de recordatorio leí: "Jesús, no me dejes pecar" con mi letra y mi firma. Todas eran así y yo como loco de contento. Eran mis primeros “Tweets”. Una vez más, algo anormal formaba parte de la normalidad. Las repartí con alegría y con honor. Eran míos. No me siento frustrado, ni arrepentido. Hoy siguen siendo mi plegaria y mi “tweet” aunque todavía no me saluden por la calle y no me digan lo mucho que les han ayudado, pero tiempo al tiempo…. Estoy convencido de ello. Jejeje.

Hoy hubiera elegido como escenario algo más íntimo y solitario, El Real Jardín Botánico, o cualquier iglesia románica de mi Zamora, huyendo de la vulgaridad. ¿La hora? algo monacal, seis de la mañana. Me presentaría solo, descalzo y con un sayón blanco. Dentro y tapados o entre rejas un coro benedictino susurrando cánticos muy católicos y con un final de ópera. Me gustaría que la homilía fuera sencilla y que versara sobre lo que más me repugna en este mundo: la injusticia, en tono alto, claro y dinámico. Que nadie quedara indiferente, no me gustan las caras de profundo aburrimiento. No hay nada peor que la indiferencia de la audiencia. ¡Ojo! que soy un niño: una homilía que comprenda.

Por su puesto, me encantaría recibirla de las manos de cardenal o un obispo con posibilidades –me puede la vanidad–, vestido de blanco y con buenos y ricos bordados en oro sobre sedas… lo mejor para recibir a Dios. Que me perdonen, pero el hábito hace al monje. Está muy bien que los religiosos sean actuales y modernos pero no me gusta nada ver celebrar una misa con zapatillas de deporte y con vaqueros. Lo siento, pero es así. O las religiosas sin sus tocas e indumentarias. Hoy, muchas con la falda vaquera y con chaquetas de punto con cremallera están mucho mejor con el hábito tradicional y pido perdón. Se evitaría, algún modelito inapropiado. Y la forma de conjuntarlos con esos horribles zapatos que tanto les gustan. Volvamos a los uniformes; por sus vestimentas los conoceréis –las diferencias vienen muy bien y marcan la distancia obligada–, son los representantes de Dios, nosotros no. Pulcritud.

Estoy seguro de que lo pasaríamos fenomenal. Imagino de anfitrión a mi padre. Era terriblemente trabajador. Tenía la suerte de poseer el privilegio divino de ser ”creativo” y de llevar una vida normal, aunque alrededor de su cabeza reunía una serie de ideas muy distintas y enriquecedoras. De los imaginativos y valientes como él siempre se aprendía algo. Gracias. A veces no lo comprendía. Era muy perfeccionista para la creatividad y no tanto para el final. Siempre quedaba algo pendiente: un hilo, un cable, una mala brochada, una bandeja sin definición… no remataba y yo, negro. Los contrastes vienen muy bien de vez en cuando. Hoy faltaría el elemento distintivo, diferente y el más rompedor, que era él. Enérgico, bondadoso y sin pelos en la lengua… ¡¡¡cuántos disgustos¡¡¡

Queridos decir adiós a figuritas de porcelana con forma de paloma que decían “En el día de tu primera comunión vendrán a verte Paz, Esperanza y Consuelo”. eso es un pasado no conocido. Mejor, después de la celebración todos, familia y amigos brindando por uno más. Y la casa por la ventana. Para estos casos lo mejor para superar la crisis de ansiedad previa, una copa de buen vino y así tranquilamente y con un halo de misterio poder saludar a todos.

*Como es habitual en Isabel y Javier, todo simpatía. Una comunión muy entrañable la de su hijo Álvaro y sobre todo una actitud totalmente señorial, amable y educada la de los anfitriones. No faltaba más. ¡¡¡Son de Bilbao!!!

5/06/2011

Gracias, corazón




Gracias, corazón

Hola buenos días, ¡dígame! Imperativo y directo. Joder qué miedo, como si un hachazo nos cayera encima. En otras ocasiones, según entras en las tiendas: "no, de su talla no tenemos nada…." Gilipollas que no es para mí. "No, todavía las rebajas no han comenzado". ¿Cómo…?
Sí, a veces entrar en algún establecimiento del ramo es así. Es ir preparado para la guerra y tener la artillería lista para responder a la marrana o marrano que te atenderán. Te miraran con cierto desprecio. Eso nos pasa por ir a tiendas, bares y restaurantes de quiero y no puedo, de gentuza. Y además casi siempre es gente poco aseada y con uña larga y sucia. Por suerte, he entrado en otras muchas (las más) donde todo es distinto. Dedicación y servicio al cliente. No hace falta ir por Claudio Coello, Velázquez o Lagasca… de todo hay en todos los sitios.

El viernes pasado, antes de entra a trabajar, iba con tiempo y decidí reponer gasolina. Por favor, el surtidor numero 4, sí, 40 euros de diésel El carné … Silencio…… Me quedo parado…Y me da solamente el ticket. Te dan ganas de pegarle una bofetada y que comience hablar “mudo”. Se dice, buenos días, gracias o hasta luego corazón, so gilipollas.

Por favor, que la niña no toque nada, en una tienda de juguetes… ¿No crees que te equivocas de negocio? Retrasado. Mejor que pongas un museo y que pases el plumero, no sirves para el público. Te iría algo mejor. Menuda subvención te ha caído para montar el negocio. En esa tienda hay tan pocas ganas de vender, le veo un futuro oscuro. Y casi hasta me alegro.

Prefiero los que venden las excelencias y mienten en positivo. “Es una pieza única”, “es algo especial”, “es un toque magistral”… está hecho para ti, mírate (con espejos trucados… así cualquiera), te hace delgadísimo, altísimo... –nunca cultísimo– es una pena. Otro ejemplo, son los que te dicen, "yo lo tengo y va fabuloso, sienta muy bien"… a ti, cabrito. Lo malo es que éstos se toman unas libertades un "tête-à-tête" que te dan ganas de…. Y todo porque llevan la ropa neo-neo hippy con toques de mercadillo algo espeluznante, pero allá cada cual… son una corte de aduladores en cuanto ven la tarjetita. Nos vienen bien para reafirmarnos en la compra, los demás no están de acuerdo con nosotros y buscamos nuestra seguridad.
Y lo que más gracias me hacen son las mantequerías, dispensadores de fiambres. ¿Ese queso que tal sale? Fabuloso, a mi “Vane” le encanta. Lo devora, el queso, el jamón de York de la selva y todo lo que lleve su madre a casa, es una animal.
Pero, todos estos son en positivo y tiene su buen valor. En estos casos, se corre peligro con la partida de parlanchines, te agotan y terminas por no volver. Recuerdo que los veranos mi madre me llevaba a cortar el pelo. El peluquero sacaba sus armas con un niño, tan rápido como desaparecía mi madre por la puerta: "Hace un día fabuloso, sí. ¿Iréis a la finca? ¿Donde la tenéis? ¿Qué, tenéis piscina? ¿Grande, supongo? Oye, el otro día os trajo un mecánico? Y ¿ese coche? Tu padre trabaja en…?". Sin parar… agotador. Observé durante los veranos que cliente que salía por la puerta, cliente que criticaba, así que pensé que conmigo haría lo mismo. Decidí no volver, cuando vi que puso verde y de feo para arriba a un niño a los que había pelado en cuanto salió por la puerta. ¡Qué no haría conmigo que era una bola!. Mejor, el peluquero militar.

Pero de verdad los que me gustan son los que tienen hijos de la edad de los míos. ¿Quien te la lleva? ¿Va por lo particular? Y siempre la mía más y mejor. ¿A que guardería? no, no va. Pero, ¿tendrás ayuda? y ¿cuánto te cobra? Va a la Milagrosa, Uhhhhh, yo es que a los curas y las monjas… que piden sin parar. Joder, y tú… Prudencia, prudencia que lo mismo tanta afabilidad hace que no me vuelvas a ver el pelo, rey.

Qué diferente, cuando vas a otros sitios y lo primero, cuando entras te embriaga y envuelve la educación y la amabilidad. Sin desbordar y pasar al peloteo y la cursilería.
O cuando voy a comprar el pan y la buena de Rocío, me dice "Buenos días corazón" y me regala una bolsa de cromos, gusanitos para mis hijas. ¡¡¡Y sólo le compro el pan y los churros¡¡¡ y se despide con un "Adiós cielo, da un Bs. a tus niñas…"

Me ha sorprendido (para mal) la pésima atención que me han dispensado en algunos sitios (restaurantes, bares…). Les he comentado lo que quería y sólo he encontrado silencios y en ocasiones se han limitado a decirme: "Pues bueno, podrías tener unos tal, o unos cual, en general tienes pocas opciones". He tenido que arrastrar la conversación a "¿y cuánto cuestan?" "¿y me los puedes enseñar?” "¿y qué crees que es mejor?" "no sé, depende de los gustos". "¿Me recomienda la merluza?".
De verdad, he visto de cara al publico poca disposición, conversación inexistente. Y a todo esto, sin pararse a mirarme un poco a la cara, todo el rato mirando por encima del hombro, como diciendo "Hala, venga, no molestes" y pide.
Cuando salgo, pienso "si me hubieran dedicado 5 minutos, igual hubieran hecho una venta estupenda". Repetiría una y mil veces, no me importa pagar de más cuando el servicio lo merece. El boca a boca corre más deprisa que cualquier anuncio.

Por otro lado, no desesperes porque no es lo habitual. Pero lo que no entiendo es cómo pueden existir este tipo de prácticas... patético. Con lo difícil que es hacer un cliente y el alto grado de satisfacción que genera la venta física. El tiempo y la dedicación para resolver y guiar al cliente por donde quiere, explicando todo y las diferencias entre unos y otros. Es de por vida. Quien no vuelve a tal pueblo y recomienda aquel hotel, o ese restaurante…. Pero…. ¡en qué manos dejamos las empresas! El servicio de postventa debe ser excelente, ofrecer facilidades: nos permitirían tener confianza. Que no parezca el aquí te pillo aquí te mato y mañana ya no sé nada…

En otra ocasión, que compré una colonia –menos mal que no era para un regalo–, cuando llegó el momento de abrirla pensaba en seducir con sus olores…. Casi me muero. Un hedor infernal que a punto estuvo de provocarme vómitos y una úlcera en primer grado. Enseguida, y una vez repuesto, me dirigí a la perfumería. Para mi asombro la dependienta estupenda, pintada, maqueta, y masajeada todo gratis, se negaba a devolverle el dinero de la colonia que no olía bien. Todo fue arranque, insultos e improperios. ¿Cómo? –ese truco estaba muy pasado, que seguro que alguien me regaló otra y la cambió… Al final, yo callado, corazón. ¿Quién soy yo para exigir un trato preferente y por inobservancia del deber a la hora de compra? Y que incluso podía tratarse de una falsificación que no había comprado en aquella perfumería. Jamás he vuelto a pisar esa tienda.

Todo cliente de categoría que se precie, donde es mal atendido no se queja: directamente no vuelve Así que ya sabes qué hacer. Aunque, lo mejor es desplegar todo nuestro desprecio o, si hay mal día, toda nuestra ira y nuestras peores caras y contestar –hay que tener valor– pero, es que a veces… desperdiciamos nuestro tiempo con la gente.

Cuando compras en alguna tienda a veces tienes la sensación de tener que rogar para que te vendan o de que estás pidiendo un favor. Mejor olvidarse de ellos. Nos tenemos que sentir cómodos y disfrutar del momento. Tendremos que impartir un curso de buenos modales o técnicas de ventas a algunos comerciantes y empleados de tiendas y negocios. ¿Verdad? Gracias rey, corazón.

4/27/2011

Ser elegante es….



Ser elegante es….

Ser feliz y hacer felices a los demás. Saberte adelantar a una petición, es hacer, sin hacer ruido. Es dar lo que uno no tiene y más. Es facilitar la palabra al otro. Darle el sitio y la risa. Nunca es ser sumiso, pero sí servicial.

Un elegante nunca molesta, es más, diría yo que siempre bien acompaña. Da sin motivo, no pide jamás. Siempre vive con dignidad y señorío. Su sitio son las relaciones públicas, facilitar las relaciones entre iguales y distintos. Tienen un sentido que les hace alejarse de advenedizos y de chupones y salen victoriosos de ninguna batalla –nunca se enfangan–. Son pacíficos. Te consideran de su clase y te administran la categoría que no tienes, les sobran eso. Es la elegancia de verdad (EdV)

Nunca ofender, callar antes. Mirar hacia otro sitio, es galantería que sufre sólo de pensar que puede herir u ofender, buenos modales su cometido. Es mi meta. He de ser modesto, indulgente, cortés, generoso, me va, sí, me costará, ya lo creo, pero me va. Sentido común, discreción y respeto.


El elegante es gracioso, nunca grotesco, ni metepatas. Sencillo, suave en sus movimientos. Corto en los adjetivos, aunque siempre acertados. Así pues, la elegancia es una disciplina humanística que resulta de varios elementos, ninguno terrenal. No hay escuela de negocios en la que se impartan estas asignaturas. Sí hay maestros visibles a los que debemos imitar y twitear. Síguelos y olvídate, ellos te guían. Son una lección de sapiencia infinita y espejo en el que mirarnos y ante el que rendir pleitesía.


La elegancia es una cualidad innata, nada tiene que ver con llevar un buen aspecto. Nada, pero también, son otras cosas: es una demostración constante, primero de sencillez y después, de inteligencia o “dones”, si nunca se aprende. Es entrega acabada, ligera, no recargada, son caminos sencillos por complicados que fueran. Lo que tengo aún que aprender… no apruebo ni en septiembre.

Los EdV están en la sociedad. Si los conoces mételos de llenos en tu vida, te darán suerte, alegría y buenas vibraciones, si te portas bien, una foto en el Hola o en Sol y Luna y mil duros ganaras. En el trabajo explótalos, cerca de ti, como relaciones públicas, como parapeto, todo lo paran con suma naturalidad. Y siempre con palabras cortas y precisas. Armonía de color nunca polarizado. Nunca piensan que lo saben todo y tinen cierto sentido de la estética, un cierto equilibrio en su vida y encima jamás hablan de dinero. Pero naturalmente controlan sus ingresos y gastos, no son nuevos ricos, controlan su patrimonio.

Seguramente no sean santos, pero vienen precedidos de una aureola quizás de color azul. Su máxima productividad, inflexión, punta o vértice en el que todo lo entregan, lo hacen bajo el ritual de la pie: ese día, no usan jabón, se duchan con agua templada y muchos sentimientos hacia el prójimo. Siempre después de ducharse, esencia en el cuerpo, según los rituales de seducción blanca. Silencio. Pensar en seducir. Aromas envolventes y el lema “cautivar cuanto vea” y mano de EdV. No confundir con sexo. Todo se rinde a sus pies. Sus maneras, sean naturales o artificiales serán calificadas de elegantes ¿Quién no se rinde ante una mujer o un hombre EdV?

Me encantaría ser así. Ser un EdV. Imagino que tanta entrega les hace ser sexualmente activos (muuuuuuuuuuuuuuu), volcán de entrega y lava de calor. Yo quiero y quizá puedo y necesito ser un EdV. Ofrecer a su pareja lo que desee y más. Si su ofrecimiento no es aceptado, no volverá a insistir, es un EdV, pero no se dará el caso.

¿Quién no ha visto y se ha dado la vuelta al ver a una mujer EdV? Es otra cosa, no son bellezas al uso. Su forma de caminar, mirar, hablar pausadamente, sentir… las hace distintas. Imán para mí, por suerte, ya tengo una. No hay en ellas nada "frívolo ni falso", todo es personalidad y carácter. ¡Ojo! que te dan un bofetada y te quedas como nuevo, todo exquisito y femenino, es lo que hace que una mujer sea elegante o no lo sea.

Son esencias que hay que beber, saborear y disfrutar. A veces la sociedad- vulgo rechaza a los EdV. La ignorancia se atreve con todo, incluso con los que son diferentes. Huye de "malas" costumbres, de la gente excesivamente ruidosa, de el botellón. No te vistas en cualquier lugar como si estuviésemos en la playa -chanclas, bermudas, sudaderas- y jamás descuides el aseo personal. Y de paso, "no comas el postre con cuchara”: vas por buen camino para ser un Edv.

4/14/2011

Ya huele


Desde Madrid ya huele. Sí, las aceitadas, los cocos y los coscarrones cocidos en los hornos desprenden aromas que llegan hasta aquí. Las viejas ruas y calles se engalanan. La cera, las teas y el incienso son esencias en la calle. Ya estamos. Por las calles estameñas, terciopelos, tulipas y medallas van y vienen. Sacar pecho, es la hora.

Lo primero felicitar a todas las Lolas y Dolores, preludio de días de fiestas y… corriendo para el Espíritu Santo. Nervios, sorpresas. Procesión. Luego en el “Charly” comentar con un torrezno –ya pasó la vigilia– y la Semana comienza. Es viernes de Dolores. Esta semana llega lenta, queremos que comience y que no termine. La algarabía rompe el silencio del tiempo pasado.

En Zamora estamos de ”Boda”, una boda por todo lo alto, con invitados por todos los sitios, y donde tendremos algún que otro problema a la hora de colocarlos a todos, -"espera que pregunto en casa de, …no, que hablo con Zacarías….bueno ya no es así, ya tenemos de tó". Las Edades del Hombre nos hicieron olvidar el ostracismo y las carencias en el que vivíamos. Pasaron los años de cero alojamientos, finalmente pudo solucionarse. Ya estamos. En la calle las procesiones escenifican y recuerdan el drama de la pasión y muerte de Jesús de Nazaret.

Somos conscientes de lo importante que es la Semana Santa. Sumar y olvidar aquellos tiempos en los que Zamora sólo salía en películas. Sí, en la que venía “una chica a servir” que era de Zamora o de Venta de Baños… y mucha Lola Gaos. Adiós a la oscuridad ya estamos en la modernidad.

Zamora es un auténtico hervidero. Después de muchos meses de ausencias, veremos a los hijos volver a casa, la familia ya está. Las tiendas llenas, –viene mi hijo con unos amigos,… y yo tengo seis, y yo doce–. Lo mejor, para los que un día salieron para hacer vida: otomán de seda para ellos.

Todo un acontecimiento, en Zamora es agosto. … aquí hay sitio para todos, estamos orgullosos de nuestra Semana Santa, queremos que la vean, que la sientan, que el forastero, –como decimos–, se sienta en casa, damos y mostramos lo mejor. Ganar el perdón. Huéspedes de honor, Nos quieren por nuestro perfil austero y comedido. Mostrémoslo y reivindiquémoslo.

Las noches, pasadas las procesiones, son de amores y de pasión, Las mañanas de paseo y presentación. ¡Es primavera¡ el mes de mayo en la puerta y todos con el guapo subido. Nada se nos resiste. La lengua fácil, la noche avanza en un minuto. Nos entregamos al fuego. Sin darnos cuenta, los primeros rayos de sol ya están. Adiós a la multitud. Las mañanas con los ojos hinchados y delicia en el “Benito”.
Hábitos que hacen al monje.

Sí, son nuestras primeras salidas nocturnas, retraso en las llegadas a casa. En las calles, miradas, correr y mirar otra vez. Tras la cancela del caperuz, nos volvemos locuaces, adiós a la timidez, quizás nuestras primeras palabras de amor y sembrar, para en la noche cosechar. Las filas son de amores y miradas fijas. Te veo en Nuestra Madre y en la Soledad. Es tiempo de amar. La espera de la procesión con pipas en un suspiro pasa. Las puertas tienen que estar abiertas y tenemos que tener el corazón dispuesto para amar. Es Semana Santa y primavera, levanta la persiana, la noche es espléndida. ¡Aprovéchala! son nuestros primeros amores.¿Recuerdas?

4/06/2011

Románico y modernismo de negro y de morado


Abril se abre paso. Trae luz, calor y diversión. Pilas, energías, churros y caballitos para los niños. Nos retroalimentamos, sacamos de donde no hay. Nos lavamos la cara. La imagen vale, utilizaremos lo que haga falta. Tenemos que estar en la olla. Y ser elegidos como primer plato de un menú abundante y variado con la minuta bilingüe. Difícil, pero hoy es lo que toca. Estar preparados para la fiesta.

De momento, me he cortado el pelo y tendré que actualizar todo. ¿Quién sabe? ¿quién puede requerir mis servicios? El panorama, que va del gris plomizo al negro intenso, se acabó. Soy otro nuevo, la temporada del negro mente está pasada. Toca rojo, prendas morbosas (dentro del recato…) energía y buenas vibraciones. Las prohibiciones, las lluvias y los olvidos que nos hacían desesperar se esfuman como pitillos. ¡Adiós al mal humor!

Bienvenida la copa de buen vino. No me gusta perder el tiempo, después de dos semanas en el suelo, sólo los desvelos de Olga y las caras de mis hijas me han sacado del catafalco en el que me encontraba. Ya estoy deseando pasar buenos ratos de relax, y así poder sobrellevar tanto trabajo “tan interesante”, “partir de cero”, “fantástico” y todo nuevo…, con el que me encuentro y que seguramente me resultará fantástico. ¡Qué bien se opina de lo ajeno!

Estos “last weekend” los hemos pasado estupendamente, de lo mejor. Con ayuda, pero bien. Preferí como siempre, volverme el lunes por la mañana por miedo a las caravanas y, lo más importante, para seguir viendo el motor de mi vida: mis hijas. La verdad, es que no sé como he podido tardar tantos años… Es el acierto de mi vida, es mi lotería…. ¡No me extraña que mis padres tuvieran ocho!, y eso que siempre es mucho sacrificio. Pero con un gran retorno de inversión, mucho tráfico de amor y cariño. Cuando algo no va… miro la cara de Elisa con sus gafitas, sus ojos, su sonrisa, su lazo… se me caen los lagrimones. Y Teresa, no por última, no menos querida. Risas, agua, agua, eto, eto… tan insistente como el padre. Con carácter, despierta, y con ganas de salir, es animadísima, todo por el aire, da sus primeros pasos y paseos… y su padre locura por ellas.

Recupero mi sentido del humor, mis apetencias (algunas no me fallan), tengo objetivos para el verano; todavía me sobraban 10 kilos… la Costa del Sol me espera un año más y mucho más simpático me plantaré (D.M.) este verano, antes la Semana Santa.

Los tiempos cambian y evolucionan y nosotros nos tenemos que adaptar con la mejor de nuestras sonrisas… aunque quizás tenga que acudir a mis conjuros y hechizos. Para las envidias, para evitar discusiones en el trabajo, para atraer, para las pesadillas…. Si lo hago,¡Ya! Prepararé un saquito ceremonial de color azul, el color de la mente. Meteré en él la menta (el verde da paz) y por cada persona que me altere: una hoja. Lo cerraré casi deforma hermética y gritaré: ¡¡¡Conjuro estas hierbas para que me proporcionen armonía y para que encuentre paz, nombro a la persona(s) cabrona(s) y saquito a la ventana toda la noche y luego a la oficina. Mano de santo.

Pero, de verdad, cuando se armará buena será esta Semana Santa. Lo voy a dar todo. Sacrificio, penitencia, nunca reñida con la diversión y el tronío, es más, siempre está ligado. Haremos aparición en las procesiones con todo el recogimiento y fervor necesarios. Ayuda y caminos nos enseñarán. Procuraré ser y estar en el lugar oportuno y con el trabajo listo. Tendremos que esperar acontecimientos y el terno de pantalón negro y camisa blanca… no faltará detalle.

¡Qué mañanas de Jueves Santo más estupenda por las calles de Zamora! Peinetas, vinito, caperuces verdes, cervecita, reencuentros. Miradas. Bandas de música, gafas de sol… glamour Zamorano. Los de aquí y los de allí tomamos la calle. El escenario inmejorable, románico y modernismo, de negro y de morado ¡Bravísimo!… Nos vemos

3/25/2011

Primeras cruces


Primeras cruces

Ábreme las ventas, solo no puedo, que me refresquen, me ahogo, me siento atrapado y sin salida. Dame la mano buen amigo la puerta se cerró.

Ya estamos en Cuaresma. Quizás es la razón por la que nos caen las primeras cruces del año. Debo sortearlas y llevarlas con dignidad. ¿Y si toco suelo? Comeré mi orgullo que es mucho y pediré ayuda al cirineo. Humildad.

Me tumbaré con los ojos muy abiertos mirando al cielo. Envuelto en mi túnica deslavazada. Por negro que esté, seguro que veo una luz que me indicará el camino. Me hará olvidar el daño infligido, mis equivocaciones. Peor fue la muerte en la cruz.

Estaba acostumbrado al bienestar, a la risa. El llanto también llega. Las estaciones se suceden. Las nieblas levantan y el sol brillaba con más fuerza. Dijimos adiós a las tinieblas y las malas raíces. Llega la primavera florida. Siembra bien, recogeremos la alegría de las ferias. Ya están cerca; antes, llega la Cuaresma, cada vez más aligerada, en nuestra sociedad.
La Cuaresma, conversión, antesala de la Pascua. Es tiempo para mirar nuestras entrañas, las de otros no tocan. ¿La bolsa cómo está? Llena, vacía, podrida, en vías de recuperación, rebosante, rota…. Es reflexión y análisis. Cimiento para la grandeza.
Me Pregunto ¿Qué somos? ¿Dónde queremos ir? ¿Nos dejan? ¿Nos ponen zancadillas? ¿Nos llevan? Es camino de rosas –lo dudo– es sufrimiento, sendero por recorrer y preparase para la renovación. Mi cabeza es un auténtico hervidero... aquí ya no hay sitio para mí. Sí, sí, lo hay.

Personalmente considero que la práctica del ayuno y de la abstinencia está bien, pero sólo si lo hacemos pensando en aquéllos que no tiene nada, una vez al año. Es sólo eso.
Cuántos somos los que, ni una vez al día, pensamos en los otros. Ellos no tienen nada. Alimento, trabajo, amigos, familia... Es acordarse. Por muy hundidos que estemos, siempre hay gente que está mucho peor. Y gente que no tiene ni quién la mire. Ni de cerca ni de lejos.
Hoy no es día fiesta, no hay glamour y ya sé que se agradece mucho. Estamos en Cuaresma, no hay adornos. Hoy no hay sitio para las turquesas ni para los corales que tenemos. Mejor en el cajón.
El mal de otros es nuestro buen camino, aunque... cómo duele. Pero con todos vosotros esta chupado.

3/17/2011

Arte para vivir


Arte para vivir

Como bien sabéis muchos, siempre me gustaron las antigüedades, la pintura, la escultura, la arquitectura y las artes decorativas.
Me gustaría que en mi casa reinara la armonía. Eso sí, con algún toque o punto de locura, –creo que esta afición me vine de mi padre–. De vez en cuando daba un golpe de timón y lo ponía todo patas arriba. Unas veces más acertado que otras. Recuerdo una de esas veces, todo fabuloso, amplio confortable, bien distribuido, pero que nos colocó la nevera en el “cuarto de estar” de casa. Lo devolvió a su sitio natural pasados unos meses. Supongo que debió de ser la causa por la que en aquellos años yo estaba un poco nervioso, desequilibrado. ¿Edad del pavo? No lo creo, era la nevera. Una experiencia.

Recorro almonedas, casas de subasta, desembalaje, mercadillos. La pintura, los objetos en desuso raros me hacen enloquecer y los precios de los anticuarios aún más. A las ferias de anticuarios de Madrid me lanzo en busca de piezas singulares. Siempre intento encontrar cosas divertidas y no muy caras y que nos gusten a todos, puzzle imposible de combinar.
Punto y aparte son los objetos antiguos –me fascinan–, ahora tan en desuso. Tanta historia. Es abrazar el pasado. ¿Qué hubo? ¿Quién te saboreó? ¿Quien engastó? Son silencios que hablan despacio, refinado y pausado, incluso si utilizas el mata-carcoma. Es Arte en tus manos.

Contemplo y puedo estar horas observando un cuadro, una composición fotográfica, un objeto de plata –poca gente me comprende– es imán para mí. Algo hay ente la plata y Josué. No sé lo que es, pero hay algo. Es una atracción enloquecedora. Sobre todo con la antigua y pesada. Es energía, son vida, reluce con la mirada y turba su color cuando la olvidas.

Esta afición, podría o podrá ser mi forma de ganarme la vida. ¿Me lo creo? Me falta una patada y formación, pues la afición ya la tengo desde hace mucho tiempo. Es un mundo que me atrae enormemente. Ser anticuario, chamarilero, coleccionista… Me gusta la pintura, la barroca religiosa de la escuela Sevillana, el tenebrismo, pero más aún Miró y la simplicidad del vacío, o el silencio en las esculturas huecas de Oteiza, su Maclas. Es vida, es arte. ¿Será la llamada erótica del poder? Si no estuvieran tan cotizadas... ¿Me gustaría? Creo que no. ¿O sí? En mi caso el gusto radica en la fuerza. De comunicación y conmoción, las que existen entre la obra y el observador.

Quisiera ser mecenas. Miento; ser el Barón Thyssen-Bornemisza, rodearme de todo aquello que me gusta, ver las paredes y huecos de mi casa llenas de colores, brochazos perfectos o imperfectos con contraste o sin él, con o sin simetría, con proporciones, desmedíos… sueño y sigo soñando. Me confieso: me hubiera gustado ser por un momento Juan Antonio Roca (“Caso Malaya”) y tener un Miró en el cuarto de baño, un Tapiès en la cocina, o la fuerza del cubismo actual de mi amigo Guillermo Muriel en cualquier parte de mi casa. Quiero que exista un diálogo con el arte y que todo lo que yo tengo –muchos sueños- que formen parte de mi vida cotidiana, Y no puedo tenerlo todo. De momento, yo no voy con bolsas de basura llenas (¡No me hagáis concejal!) y me conformo con obras gráficas.

A pesar de lo mucho que sufro (jejejeje) por no tener todo aquello que deseo…. Cuando la veo en museos, revistas, libros, o en casa de alguien, ¡me merece tanto la pena!… La paliza mental es impresionante, por eso digo que sufro. Por mucho que os cuente no podéis haceros la idea de la que se organiza en mi cabeza: las neuronas se arremolinan, se empujan, flashes, los gritos me pueden… ¡¡¡Como podría yo dar rienda suelta a mi afán posesivo!!! Pues... con los pies en el suelo. Busco la sonrisa y hacia adelante. Son mis “petites histoires” con el arte.

Me gusta La decoración con estilo clásico, que considero es un ejemplo de sofisticación y refinamiento, de buen gusto y elegancia. ¿Por qué? Pues porque es acogedor, La simetría es la regente de la decoración. Recordáis.-

http://conletrainglesa.blogspot.com/2009/07/simetría-inglesa.html.

- Simetría inglesa y con sorpresas ya es la leche. Ahora no es su tiempo. Las tendencias actuales son: el hormigón con cemento pulido. Es tiempo de crisis, nada vestido. No es tiempo de recargar, ni de acumular. A pelo. Auguro que, en cuanto se acabe la crisis, volveremos a interiores más suntuosos nos envolverá a todos la opulencia en nuestras casas. Las piezas imaginativas, divertidas, los plásticos, los diseños escandinavos, austeros, y el minimalismo exagerado volverán atrás. Lo “royal”, lo noble, las ricas maderas, los buenos materiales se implantará de nuevo.

Muchas veces es una tomadura de pelo cómo piezas de los años 50, 60, y 70 son cotizadas como joyas. Fueron años de cambios, movimientos radicales, transgresores, nos invadieron los plásticos y todos los derivados del petróleo, junto con una imaginación desbordante, pero nada más. El diseño era impecable. Pero de verdad que analizándolo, considero demasiado atrevidos y sobrevalorados algunos de sus precios. ¿Quizá porque no terminan de gustarme del todo? Sí.

Creo que apostar por el arte de la mezcla, buscando lo esencial, la sencillez y la sobriedad nos traerá buenos acordes. Además podemos y podéis adivinar infinidad de características de nuestra personalidad: atrevido, inconformista, aburrido, simple, disipar, imaginativo, ordenado, sucio, cuadriculado, aventurero, culto... Todo lo que querías y más. Lo propondré para la próxima selección de personal: entrega tu CV y una foto de tu casa. Conforman tus señas de identidad. ¿No lo crees?

3/09/2011

Una ventana al mundo


Hoy me arrepiento. Sí, me levanté, con algo de sueño, y comencé con las tareas rutinarias. Cara a cara con mi armario me dije: "Qué más da"… y lo primero que vi. ¡Craso error! En ese momento tenía que haber elegido bien. No todo vale, hay un día por delante. Sentirse bien, pese a las distintas adversidades es fundamental y "bien plantao" una forma segura y estupenda de abordar el nuevo día. No lo pensé.
Es verdad, debería haber estado bien preparado para el día. O bien ir cambiando de ropa según el estado de ánimo que adquiero a lo largo del día. ¿Tantos son? muchas veces pienso: deberían estudiarme. A lo mejor dan con el principio de enfermedades que se desarrollan en la vejez. ¿Seré un bipolar? ¿Seré un ciclotímico? ¿Seré imbécil? Pues no lo sé. Pero sí sé que determinadas vestimentas o aspectos me hunden; otros me levantan y otros me hacen soñar. Incluso tanto, que en algún caso mis michelines se convierten en tabletas: esto sí que es soñar. Qué poder el de un traje, un pantalón, o unos zapatos. Unos buenos zapatos te hacen pisar con seguridad ante quienes sea.

Ya pienso en el día que me reciba D. Juan Carlos… Preséntale mis devociones. Deberé llevar zapatos impecables, calcetín hasta la rodilla…... ¡Qué seguridad proporciona un buen calcetín ¡que no se caiga, que quede uniforme! (pensareis: joder con este psicópata) bien tintado, sin apretar, hilo escocés. Lo que me echen, estoy bien calzado.

Quién no recuerda todos los preparativos previos a una cita. Seguridad ante todo. Primordial dar con la colonia y el desodorante perfectos. Todo por delante. Darlo todo. No confundirse y no probar cosas nuevas en una cita importante, pues todo puede caer hacia un abismo. Nervios, sudores, manchas en las axilas en la camisa –para eso lo mejor el algodón egipcio. Podría resultar lo más ordinario para presentarse ante nadie. Prima la seguridad en uno mismo. Tranquilidad –sentirte a gusto– y nada de experimentos.
Depende de las emociones que pretendamos despertar, moveremos nuestras fichas. Imagen clásica, pijo, Animal print, desaliñado, católico, pijo de provincia, poligonero, deportista, siniestro, preppy…. las prendas y su lenguaje. Yo, intento ante todo no ser aburrido. A no ser que pretenda ser el anodino que no abre la boca, el simple… en esto casos mejor me quedo en casa. Todo es posible, mueve ficha y comunica tu imagen con seguridad y ya veremos… Sin ostentación, imagen básica, de colores claros y limpios y la máxima: menos es más. Pero todo por ganar.
Sí, me arrepiento, debí pensarlo mejor. A medida que avanza el día, más me arrepiento. Quizás porque podría encantáreme mejor de otra forma. No es sólo estética o moda, es una forma de comunicar, de seguridad. ¿Conocéis a alguien más seguro que Rápale en un escenario y va de Negro? Es eso es comunicar y sentirse seguro.
Recuerdo que cuando tenía exámenes y posibilidades de superarlos (no siempre estaba en el grupo) tenía un ritual casi religioso –diría yo que místico–: color gris-azul (tranquilidad) y repaso de la materia. Buen aspecto, sabía de mis posibilidades, me crecía, podía con todo. Invencible. ¿Era el color lo que me daba la seguridad que necesitaba? No lo sé. Pero a mí me hacía sentir y sentía derroche de posibilidades.

Debí de pensar que el día tenía 24 horas y no diez minutos. Tengo que estar al cien por cien ¡Todo el día! No tengo que esconderme, debo seguir haciendo mi vida con la cabeza muy alta, pese a la situación que yo estoy viviendo: estoy hecho un Asco… Lo único que espero es que “las aguas vuelvan a su cauce“. Mañana me lo pienso mejor. Hoy tenía planificado mi día en todos los sentidos. La clave para mí era no perder tiempo ni energía. Sobre qué ponerme o qué no ponerme ¡a las seis y media de la mañana! Y con un ruido atronador de la tarima del pasillo. Me vestí decente y rápidamente para no despertar mis hijas.

Vestir bien es respeto a uno mismo y a los demás. Lo más Importante es que sea al gusto de uno, sabiendo que la sencillez es la suprema elegancia. –y yo hoy vestido de barroco de extrarradio– no es mi día. Creo que lo importante son las emociones. Un mismo traje lo pueden llevar dos personas y el resultado pueden ser dispares. Hay que sentir, hay que saber llevarlo, tener gracia, adoptar las licencias con las que uno se sienta a gusto y cómodo. El buen vestir facilita la relación con los demás y con uno mismo, no es una máscara, es una ventana al mundo. No es difícil, ni tiene por qué ser caro ir bien vestido, el secreto está en saber elegir bien y sentirse cómodo y Seguro. Yo hoy no lo estoy. .